Seguramente conoces muchas personas a las cuales no les gustan ser parte de una fotografía, los motivos son simples, no se ven fotogénicos, sienten que no se ven bien ese momento o le temen al ¿fotógrafo novato y sus fotos insólitas?.
Si bien las excusas son muchas para no dejarse tomar una foto, pero el problema mayor es cuando tu eres fotógrafo profesional pero tu pareja a pesar de este detalle no quiere ser fotografiada de ¡ninguna manera!. Esto le ocurrió al fotógrafo Mikaël Theimer al querer retratar a su novia, por suerte, él no se dio por vencido, a pesar de que su novia no dejaba de ocultarse logro tomar una serie de fotografías sumamente divertidas que vamos a compartir a continuación.